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martes, 3 de julio de 2012

Eva


En un futuro cercano donde la humanidad convive con robots, Alex regresa al que una vez fue su hogar para crear un robot con aspecto de niño. Una vez instalado en su antigua casa, comenzarán a aflorar sentimientos del pasado, mientras conoce a Eva, la hija de su hermano, una niña muy especial.

Nos encontramos ante el debut en la gran pantalla de Kike Maillo, así que como todas las operas primas, esta suelen gozar de ideas frescas, pero también de defectos que en sucesivas películas los directores van puliendo.

En el caso que nos ocupa, el director ha optado por abordar su historia dentro del ámbito de la ciencia ficción, un género que apenas es tratado en el panorama nacional (imagino que por razones de presupuesto muchas veces) y que aquí sirve para dotar de cierta atmósfera mágica y de ensueño.

En realidad la película en si, es un drama que gira en torno a un triangulo amoroso con toques de sci-fi. Y pienso que la ambientación futurista de la que hace gala no es para nada imprescindible a la hora de narrar la historia que nos cuenta. Podría haber situado la acción en cualquier época y pienso que el resultado habría sido casi el mismo.


En cuanto al eje de la narración, encuentro que los actores están bien (no tanto la niña en mi opinión), pero que la historia carece de la fuerza necesaria para que esa pasión y ese dolor nos llegue. Pienso que va a medio gas en todos los sentidos. Ni me llega ese romance, ni acabo de sumergirme en ese mundo futurista que nos propone. Se toma muchas molestias para meternos en ese futuro tan cercano para luego abandonarlo y sumergirse de lleno en una historia que yo ya he visto otras veces y que he vivido con más intensidad que en esta ocasión. No me hace falta ver la "perfección" de los robots, para ser consciente de la imperfección del ser humano.

Pienso que este debut cuenta con un diseño de producción y unos Fx de primer orden para ser una película española que están "desaprovechados" al no narrar una historia que ahonde más en el fantástico y deja demasiado terreno al drama de manual. Imagino que la desigual acogida en el festival de Sitges vino motivada por esto mismo.

Espero que en los siguientes largometrajes de Maillo aborde el fantástico sin complejos y apueste por una historia más arriesgada y no tan tradicional. Veremos.


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