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martes, 10 de julio de 2012

Trans-gen. Los genes de la muerte




John, cientifico de profesión, recibe de su madre un extraño encargo antes de morir, destruir todos sus estudios y experimentos cientificos en la antigua casa de campo. Allí acudirá junto con sus amigos para descubrir en que trabajaba su difunta madre y la existencia de un supuesto hermano, el cual desconocía.


Esta es una de esas pelis que no puedo separar del factor nostalgia. La época en que ir con mis padres al videoclub se convertía en todo un acontecimiento y me perdía entre las estanterias del "Gamma" (que así se llamaba el primero al que estuvimos apuntados).


Ahora soy un devorador de revistas, blogs y cualquier noticia relacionada con el cine en general y con el fantástico en particular, pero por aquel entonces, la única información que poseía era a traves del programa de tv3 "cinema 3" de Jaume Figueras, los trailers que venían al principio de las cintas VHS y las caratulas de las propias cintas.


En esta ocasión a pesar de que la portada ya ejercía bastante fascinación sobre mi, supe de esta cinta por el que era mi "paraíso utópico", el festival de cine fantástico de Sitges y el reportaje sobre la edición de aquel año en el programa de televisión del crítico de la eterna barba blanca. Soñaba con ir allí y vivir en mis carnes todos aquellos horrores cinefilos, pero en mi tierna infancia debía conformarme con degustarlos desde la comodidad del salón de mi hogar.


En aquel reportaje mostraban una imagen que se quedó grabada en mi memoria al igual que el título de la película. La imagen en cuestión tenía que ver con una enorme sandía y un coche...y no digo más para aquellos que no sepan de que hablo.



Lo siguiente fue ir al videoclub y que un día apareciera la película en cuestión. Una de esas cintas que se te queda grabada a fuego entre mares de recuerdos pero que luego se pierde en el olvido y nadie parece saber de su existencia.


Vista hoy, la película goza de una buena ambientación y sus dosis de suspense hasta que entra de lleno en el terreno de las "monster movies". Los actores cumplen con su cometido y están correctos, llamando la atención la presencia del veterano Rod Steiger dando vida a un "mad doctor".


En cuanto al apartado de Fx, el diseño de los "bichos" no acaba de ser de mi gusto...me recuerdan a una especie de fetos con tentáculos, y casi que resultan más atractivos cuanto menos se ven (¿menos es más?, ¿sugerir antes que mostrar?). En cambio el apartado de los efectos de maquillaje si se me antoja mucho más acertado e inquietante, habiendo un par de escenas que seguro fascinarán a algunos y asqueará a otros...jeje.

Una modesta peli de terror que gustará a los nostálgicos de los 80 y que descubrirán aquellos que la desconozcan.


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