Eres un agente de la ley, persigues a una persona de lo más corriente, sin historial delictivo, que un buen día decide ser el número uno en la lista de los criminales más buscados. Tiene gran afición por los coches deportivos, robar bancos y matar sin pestañear a todo el que se ponga por delante. Un caso de lo más raro. Y para resolverlo te asignan como compañero a un agente del FBI con unos metodos un tanto "marcianos".
Estamos ante una "buddy movie" atípica. El súbgenero vivía sus años de glória con "Limite: 48 horas" o la saga "Arma letal", peliculas en las que dos personajes opuestos en personalidad y métodos han de dejar atrás sus diferencias para hacer frente a una amenaza (por lo general un delincuente muy peligroso). Normalmente este tipo de cintas eran de acción pura y dura, aunque algunas apostaran por darle ciertos toques de humor. Pero está claro que si tuvieramos que buscarlas en las estanterias de una tienda sería en la misma sección donde encontrariamos "Jungla de cristal", "El caso Bourne" o "Mision: Imposible" por mencionar algunas.
La cinta que nos ocupa, en cambio, tendríamos que buscarla en la estantería dedicada al cine fantástico. Es una "buddy movie" si, pero aquí el criminal a perseguir es un extraterrestre. Una especie de babosa con patas del espacio que tiene la habilidad de cambiar de cuerpo entrando en su victima (y a la vez huesped) por la boca. A partir de ese momento, la persona en la que se aloja es un mero recipiente para el alien que cogerá todo cuanto esté a su alcance y le guste. Los gustos de la babosa sideral, por cierto, son de lo más curiosos. Deportivos de lujo, rock duro, dinero, mujeres. Da igual el cuerpo que ocupe, su comportamiento será siempre el mismo, cosa que a pesar de cambiar de apariencia, hará más fácil seguirlo por el reguero de sangre que irá dejando tras de si.
Jack Sholder dirige con bastante acierto la pélicula, repleta de escenas de acción, persecuciones y tiroteos. A ratos recuerda a "Terminator" (por aquello de enfrentarse a un enemigo imbatible al que parece imposible matar). Pero la cinta se sigue con interés y agrado, tanto por el buen hacer de su director (firmante de "Solos en la oscuridad", "Pesadilla en Elm Street 2") como por su dúo protagonista, en especial Kyle MacLachan, actor de larga trayectoria unido en sus inicios al cine de David Lynch ("Dune" y "Terciopelo azul") y eternamente recordado por su papel en la mítica "Twin Peaks" tambien de Lynch. Si bien ha hecho mucho cine, últimamente ha sido más fácil verlo en la pequeña pantalla en series como "Sexo en Nueva York", "Mujeres desesperadas" o "Como conocí a vuestra madre".
En cuanto a los Fx, nos encontramos ante una producción modesta que sabe sacarle partido a cada céntimo, por lo que en cada tiroteo veremos un montón de heridas de bala y sangre de lo más convincentes. Tambien resulta igual de efectivo en todas y cada una de las apariciones el alien. Diseñado de forma sencilla pero muy convincente y que cumple con su cometido (dar asquito cada vez que sale en pantalla,jeje). Como curiosidad tenemos un cameo del ahora famoso "Machete", el actor Danny Trejo.
Una pelicula que fue un éxito en su época pero que parece algo olvidada y que tuvo una tardía secuela (que veré un dia de estos y comentaré). Parece que como otros grandes y pequeños clásicos de la época andan trabajando en un remake. Seguro que no hará más que evidenciar lo buena que es la original.
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